martes, 20 de octubre de 2009

La genética y la Selección Natural (Parte 2)

En la primera parte expliqué que no existía una lista para la selección de plantas y esto es cierto. Lo que cada persona quiere variará en función de las preguntas formuladas en la primera parte. Sin embargo hay dos cosas que serán coherentes, independientemente de las necesidades y la genética en las primeras etapas de la vida y que simbolizan en general buenas plantas:




- Alta germinación.
- Buena salud en general y un vigoroso y constante crecimiento.

La primera cosa a tener en cuenta es la velocidad de crecimiento, que puede ser observada en todas las fases de la vida las plantas. Las semillas que germinan rápidamente, con un rápido y constante crecimiento, son indicativos de una buena genética. Por el contrario las semillas que son muy lentas para germinar y se rezagan de sus hermanos en vigor y tamaño, son claramente de genética débil. Esto no quiere decir que las primeras semillas para germinar van a ser la mejores plantas, sin embargo mi experiencia me dice que las mejores plantas que han crecido a partir de semillas suelen ser uno de los primeros grupos en germinar.

 

Neville Schoenmakers, maestro de selección
genética y el Rey Original del Cannabis

Hablemos otra vez de mi amigo y su primera cosecha. Plantó 10 semillas con la expectativa de elegir entre las 4 o 6 mejores plantas, la mejor madre. Del total de los 10, 6 fueron buenas Super Silver Haze, y de éstas espera usar una como madre. Para encontrar una planta verdaderamente especial, planta muchas semillas de una cepa, tantas como sea posible. De 6, al menos se debe obtener una planta fuerte, que represente los rasgos genéticos que busques.

De sus 10 semillas una no germinó. Siete germinaron en la primera semana y las dos últimas tardaron dos semanas completas en brotar. Las dos últimas plantas fueron descartadas antes de la floración por dos razones:

En primer lugar se trata de una semana entera más tarde de las dos ultimas semillas, lo que significa que están menos desarrolladas y no florecerán con las demás. La segunda razón fue que no mostró signos de recuperación. El crecimiento no fue tan vigoroso como las siete primeras y el día en que los ciclos de luz fueron cambiados a floración, no habían mostrado signos de recuperarse de forma rápida.

No veía ninguna razón para alargar el crecimiento de las siete primeras plantas para que las otras dos se prepararan mejor para la floración. Es importante recordar que las semillas que se requerían fueron plantadas para desechar las plantas más débiles. El objetivo de este ejercicio es encontrar una planta fuerte, coherente, no para producir la mayor cantidad de cosecha. La cosecha será más importante para nosotros cuando tengamos una buena madre produciendo numerosos clones

 En la tercera parte y final. Tendremos en cuenta las 4 restantes plantas que se cultivarán a la plena madurez y comienzaremos a observar las características que mejor se adapten al productor y a sus necesidades a largo plazo.